Rosa sin espinas.
Tuvo que ser en Domingo. En Sevilla, las cosas no pasan por algo, si no como la Providencia divina quiere.
El día que Resucitó el Señor, en Domingo, fue cuando el Señor Arzobispo se dirigió a la Basílica Menor de Santa María de la Esperanza, conocida como la Basílica de la Macarena.
Allí estaba Ella. Todos nos hacíamos presagiar una buena noticia, la sonrisa de la Virgen era impresionante, y es que cuando en Sevilla sonríe la Macarena, es motivo de alegría.
Tras el rezo del Ángelus, llegó la grata sorpresa, el Arzobispo lo anunciaba, su santidad el Papa Francisco, otorgaba la Rosa de Oro a María Santísima de la Esperanza Macarena por su devoción universal.
La Rosa de oro, en España, solo la poseen 3 imágenes marianas que son:
– La Virgen de la Cabeza (2009)
– La Virgen de Montserrat (2023)
– María Santísima de la Esperanza Macarena (2024)
Tras conocerse la noticia, empezaron a repicar de glorias las campanas de la puerta del cielo, algún que otro estallido de pirotecnia, convirtió en el 22 de Septiembre en un día inolvidable para el barrio de la Macarena.
La imposición de la Rosa será en los días previos al congreso de Hermandades, donde en ese 8 de Diciembre, la Virgen de la Esperanza lucirá su mayor galardón pontificio, la rosa de oro.
Fijarse como es de importante, que desde el Domingo por la tarde, la Virgen de la Esperanza luce en sus sienes la corona de salida que se hiciera en el 1913 en Joyería Reyes y que en el 1964 quedara para siempre en las sienes de esta devoción mundial, la de la Esperanza Macarena.
Todas las Hermandades, asociaciones, agrupaciones, políticos, diócesis… pusieron mensajes en sus redes sociales felicitando a la Hermandad de la Macarena y a Sevilla por esta maravillosa noticia.
De nuevo su luz, ha llegado a Roma, y es que la Macarena, es la luz que alumbra la vida, es el alfa y el omega, la Macarena es su Arco, un amanecer, una marcha, un palio, la Macarena es su asistencia social, es la devoción universal, y es por ello, que decir Sevilla, es decir… MACARENA.
