
Imágenes del exterior de Parlamento de Andalucía
MARÍA VÍLCHEZ MANCHÓN/SEVILLA
La historia del Parlamento Andaluz esconde grandes misterios que hacen del edificio un lugar muy atractivo. Aunque ahora presente una imagen de carácter institucional y el lugar esté totalmente transitado por los políticos andaluces, varios siglos atrás su aspecto era otro y las personas que recorrían sus pasillos eran personas totalmente distintas a las que lo recorren ahora. El Parlamento Andaluz fue antes el conocido como Hospital de las Cinco Llagas que fue fundado por Catalina de Ribera y su hijo Fernando que pertenecían a la alta cuna de Sevilla. Ellos fueron los encargados de levantar un hospital que acogió a enfermos de todas partes de España. Este centro de recuperación poseía nueve patios gigantes y un gran patio central en el que se recibían las visitas. En este lugar trabajaron desinteresadamente varias monjas y dicen que una de ellas se quedó para siempre a vivir allí. Se trata de la hermana Úrsula que murió en una epidemia de peste aunque su espíritu, según dicen, sigue vagando por los rincones de este edificio sevillano tan emblemático.
Según cuenta la leyenda, Úrsula paseaba por las estancias del Hospital de las Cinco Llagas hoy convertido en Parlamento de Andalucía con una larga túnica negra, con el rostro cubierto por casi toda la cara y con unas llaves en la mano. Tras la puesta de sol, se empezaban a escuchar gritos y ruidos misteriosos en varias habitaciones. Aquellos enfermos que recibían la visita de esta religiosa aparecían muertos a la mañana siguiente. Todavía son muchos los que se preguntan si Sor Úrsula, como así la llamaban, sigue en el lugar que fuese su hogar durante mucho tiempo o si bien decidió abandonar Parlamento de Andalucía. Lo que está claro es que es o fue una de las personas más relevantes que ha caminado por ese lugar.