La defensa de Juana Rivas afirma que agotará todas las vías legales, incluida la petición de indulto, para evitar que entre en la cárcel y la pérdida de la patria potestad de sus dos hijos. Su ingreso en la cárcel se debe a que el Tribunal Supremo le ha condenado a dos años y medio de prisión por sustracción de menores.

En 2016, Juana Rivas se llevó a sus dos hijos de Italia, donde tienen fijada su residencia habitual, e incumplió las resoluciones judiciales que le obligaban a entregárselos al padre, al que acusa de malos tratos. Aunque el Supremo ha rebajado a la mitad la pena impuesta inicialmente a esta madre granadina, esto no impide su entrada en prisión y su defensa está a la espera de condena.

El letrado Carlos Aránguez, que ha asumido la defensa de la acusada ante el Supremo, señala que Juana Rivas está condenada a una pena inferior a tres años. Se le condena por un delito no violento, ya que carece de antecedentes penales. Aránguez considera que es “de justicia hacer una lectura de género” en este caso y confía en que Rivas podrá obtener un indulto total.

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