La Diputación de Sevilla va a invertir diez millones de euros para la mejora de carreteras provinciales con el fin de mantener la seguridad y optimizar las condiciones de tráfico. A su vez, va a emplear 3,5 millones como parte del contrato anual que mantiene la conservación de las mismas, además de otros siete millones que serán destinados a vías singulares.
El presidente de la entidad, Rodríguez Villalobos, ha señalado que las actuaciones “responden a los criterios que los técnicos estiman oportunos con el fin de afirmar que en las carreteras de la provincia no existe peligrosidad”. Además, este plan de inversión se va a desarrollar en cuatro zonas principales en la provincia. La primera agruparía a los territorios de Constantina, Cazalla de la Sierra y El Castillo de las Guardas. La segunda zona estaría comprendida entre las localidades de Estepa, Osuna, Écija y Puebla de Cazalla. La tercera se divide entre Carmona y Morón de la Frontera. Y finalmente, la cuarta zona está compuesta por Utrera, San Juan de Aznalfarache y Pilas.
Además de esta propuesta, la Diputación tendría en marcha el programa Vías singulares’ que tiene como objetivo destinar siete millones para “dar solución a los alrededor de 50 kilómetros de vías asfaltadas que presentan una problemática determinada en 16 municipios”, según ha podido informar la Diputación.
