Tras presentar su nueva colección en la aldea de El Rocío, el diseñador almonteño da las claves del estilo de romera. Sus diseños sirven tanto para el sendero como para estar en el pueblo. Además, Gil Ortiz también distingue entre modelos flamencos de día y de noche.
“La Romería del Rocío es una explosión cultural y social tan grande. Nos ha inspirado para crear la nueva colección 127 con diseños para cualquier momento de esta romería. Todo, tan atractivo, nos ha valido para nutrirnos e inspirarnos. Desde cómo se arreglan las mujeres de algunos pueblos o hermandades hasta la esencia tan flamenca que conservan muchas otras de las romeras que llegan hasta la aldea. Sin olvidar la estética de las abuelas almonteñas de antaño portando los atributos de la Blanca Paloma”, explica Gil Ortiz. La comodidad siempre es la base de un estilismo rociero. Mucho más abierto a la hora de jugar con los contrastes, las hechuras y las combinaciones de colores. En ese sentido, Gil Ortiz propone tres diseños muy demandados entre sus clientas, diseños que muestran el Rocío en todo su esplendor.
“Si pienso en el sábado o domingo del Rocío se me vienen muchas cosas a la mente. Las mujeres de Almonte recibiendo a las hermandades en la puerta de la Ermita, las fotos de la reina Sofía en su llegada al Roció con la hermandad de Triana y esos momentos están reflejados en estos vestidos. El sábado es un día grande y estos son vestidos que calzan perfectamente con el día al igual que con la misa pontifical del domingo por la mañana”, concluye el diseñador almonteño.
Gil Ortiz, sin lugar a dudas es uno de los mejores diseñadores de flamenco del momento.
