El monumento recupera su color original y permitirá solamente el transito peatonal
La ciudad de Sevilla está sumergida en diversos proyectos de construcción por varias zonas, con el fin de mejorar y restablecer ciertos monumentos. Una de esas zonas es el barrio de la Macarena, donde su característico monumento se encontraba en obras desde el pasado mes de agosto. Pero, tras meses de maniobras, el Ayuntamiento de Sevilla por fin ha concluido las obras de restauración del Arco de la Macarena.
Estas maniobras estaban dirigidas por la conservación del Bien de Interés Cultural, para mejorar su estado y garantizar su preservación. Además, gracias a los tratamientos utilizados durante las obras ha permitido devolverlo a un gran estado de mantenimiento, así como volver a su color original. Un color ocre que destaca en los pináculos de remate y en parte de la cubierta. Otra de las novedades tras su restauración, el monumento ya no permitirá el tránsito de vehículos, siendo así solo para uso peatonal.
Durante la mañana del martes 6 de abril, el alcalde de Sevilla, Antonio Muñoz, declaró que “esta inversión cuenta con más de tres millones de euros en el que nos comprometimos en finalizarlo antes de Semana Santa.” Dicho esto, el alcalde daba por finalizada la segunda fase del proyecto. Dando así, luz verde a su tercera fase, donde se rehabilitará la muralla extramuros. En cuanto a esta intervención en el Arco de la Macarena se ha podido descubrir elementos ocultos en su interior. Unos elementos pertenecientes a otras épocas que remontan a la antigua puerta de la muralla de Sevilla.
Entre ellos, se ha podido encontrar fragmentos del almenado que corresponden a la puerta medieval, incluso muestras decorativas del siglo XVIII. Así como diferentes policromías y esgrafiados de color ocre, rojo, negro y almagro. Aunque la joya de estas obras se centra en el descubrimiento de una antigua cámara del cuerpo de guardia de la muralla, justo en el interior izquierdo de la estructura. Un espacio casi intacto donde se encontraban los elementos que utilizaban los guardias durante su estancia, tales como restos de cerámica, un banco de piedra, utensilios, entre otros. Gracias a estos hallazgos, permiten conocer mejor las múltiples etapas por las que ha pasado el monumento.
En definitiva, el barrio de la Macarena podrá disfrutar y presumir de su renovado Arco durante esta Semana Santa, por donde la Virgen de la Esperanza Macarena y el Cristo de la Sentencia cruzaran como manda la tradición.
