La bomba estalló cuando el FC Barcelona, prohibió la entrada de aficionados visitantes al campo.
En la noche del pasado domingo 5 de febrero, tuvo lugar la disputa del encuentro liguero perteneciente a la jornada 20, entre FC Barcelona y Sevilla FC. La polémica estaba servida desde antes del comienzo del partido, ya que este fue declarado de alto riesgo.
El Barcelona anunció en la previa del encuentro frente al Sevilla que no vendería entradas a todos los aficionados nervionenses que, de manera individual, quisiesen adquirir una, ni dejaría entrar a los seguidores blanquirrojos que presentasen simbología del club hispalense. El Sevilla presentó una queja formal al Barcelona y comunicó también su descontento a LaLiga.
El mensaje emitido por la entidad azulgrana fue el siguiente: “Prohibida la compra para aficionados del Sevilla Fútbol Club. Se denegará el acceso al estadio a aficionados con vestimenta o emblemas del Sevilla Fútbol Club”.
El comunicado del equipo rojillo contenía las siguientes palabras: “El Sevilla FC quiere mostrar su sorpresa y desacuerdo ante la advertencia que se traslada al aficionado interesado en adquirir una entrada en los canales oficiales del Fútbol Club Barcelona para el encuentro que se disputará este domingo en el Nou Camp a las 21:00 horas”
Otro de los grandes manifestantes ante el suceso, fue el ex presidente sevillista, José María del Nido Benavente y esto lo hizo de manera contundente: “El primero que se presentaba en el palco con una bufanda del Sevilla sería yo, a ver si alguien me la quita”. “Si a mi afición no le dejan entrar en el Camp Nou, en el Sánchez-Pizjuán no entrará una bandera culé, me tienen que matar. Está más claro que el agua. Nosotros somos iguales que ellos. Superiores porque somos sevillistas”
