STP Reparaciones es un establecimiento sevillano con gran experiencia en las reparaciones de móviles y otros dispositivos. Nos han concedido una entrevista para dar a conocer la situación actual que vive tras el inicio de la pandemia por el coronavirus.
¿Cómo va el negocio?
Pues va bien, yo cambié el horario en marzo, tenía horario partido y nada más que empezó la pandemia puse horario seguido de 10 a 5 y así hemos continuado.
¿Habéis tenido alguna modificación aparte del horario?
Aparte del horario, la higiene, limpiar el local, airearlo. Lo que son las medidas anticovid las estamos llevando a rajatabla.
Supongo que es algo que preocupará a los clientes, ¿no?
Claro, también hemos puesto un sistema de desafectación de los teléfonos que traen los clientes, tanto cuando los traen como cuando se les devuelven, para que tenga la seguridad de que no van a recoger un teléfono con la pantalla reparada, pero con virus. Los damos desinfectados y los portátiles también, todo lo que sale, sale desinfectado.
¿Ha habido algún cambio en la clientela con respecto a antes de la pandemia?
La clientela sigue entrando, lo que he puesto es la normativa en la ventana de que solo pueden entrar un cliente o dos a la vez y se esperan fueran, lo están respetando.
¿Por qué es seguro acudir a tiendas como la suya?
Porque cumplimos todas las normas de seguridad que nos pide el gobierno. Cada hora dejamos 10 minutos las ventanas y la puerta abierta para que se ventile tanto la tienda como el taller. Tenemos gel hidroalcohólico en la entrada y el mostrador. Y como comentaba antes, desinfectamos los terminales tanto a la entrada como a la salida. También nosotros los trabajadores nos tomamos la temperatura todos los días antes de entrar en el trabajo y nos lavamos las manos entre clientes y limpiamos el mostrador entre cliente también.
¿Me podrías contar qué servicios ofrecéis en vuestra tienda?
Pues nosotros reparamos televisores, ordenadores, portátiles y tabletas. Durante la pandemia lo que hicimos es dejar de reparar televisores. Contábamos con un técnico de televisores, pero en marzo le dimos de baja.
¿Y alguna otra consecuencia que haya sufrido durante la pandemia?
Estamos teniendo dificultades para poder acceder a los repuestos. Los repuestos de los móviles normalmente vienen de fuera, por lo que cada vez tenemos más dificultades para acceder a ellos porque están subiendo de precios y son cada vez más difíciles de conseguir a un precio razonable. Por ejemplo, las pantallas de los Samsung que ya de por sí eran bastante caras están subiendo ahora con la pandemia también.
¿Y cuáles son los mecanismos ahora para adquirir esos materiales? ¿Siguen siendo los mismos?
Siguen siendo los mismos.
¿Se preocupan u os preguntan sobre la desinfección de sus móviles los clientes?
Hay clientes que son más cuidadosos que sí nos lo exigen, pero una vez que ven que nosotros lo hacemos por defecto ya no suelen tener más preocupaciones. Ya no vuelven a preguntar.
Entonces, ¿ustedes habéis recibido alguna ayuda económica por la situación en la que vive el país?
Pues la verdad que no hemos recibido ningún tipo de ayuda. Nosotros pedimos el ICO, el ICO para los autónomos, pero lo que es ayuda para los pagos y demás nada. El dueño del local fue el que nos ayudó de marzo a abril, ya que nos dejó a la mitad el alquiler del local.
Y bueno, con respecto a los meses más duro de la pandemia, ¿tuvisteis que cerrar?
Gracias a que éramos indispensables, por los métodos de pago y recarga de móviles, nos consideraron indispensables y pudimos estar abiertos, incluso los quince días de cierre total. Cambiamos los horarios, pero estábamos legalmente abiertos.
Es curioso conocer un testimonio ajeno a los médicos o los comercios de primera necesidad, ¿cómo era el estar trabajando?
Pues era complicado, porque venían únicamente la gente que lo necesitaba de verdad, que necesitaba el teléfono para trabajar o estudiar, y la gente que venía era porque lo necesitaba sí o sí. Estábamos prestando un servicio casi vital, porque los portátiles y los móviles se necesitaban tanto para el trabajo como para estudiar.
¿Había miedo en esa época?
Pues sí que había miedo, las calles estaban vacías.
¿Tiene miedo a una nueva cuarentena que pueda afectar a su negocio?
Pues la verdad es que estamos a la expectativa de como va evolucionando la pandemia. Guardamos la esperanza de que volvamos a ser indispensables si así lo deciden los políticos.
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